Te Atrapé
A pesar de tener una premisa potencialmente intrigante, no fui a ver “Te Atrapé” con demasiadas expectativas. Esto se debe a que la reacción en otros países, tanto de la crítica como del público, ha sido bastante fría; aparentemente, según lo que había leído antes de entrar a la sala de cine, no se trataba de una grata sorpresa, como la divertida “Noche de juegos”, la cual tuvimos la oportunidad de ver hace unos meses. Esto no sorprende, considerando la calidad de las comedias que Hollywood estrena año a año, pero sí decepciona si tomamos en cuenta el gran reparto que lograron reunir para “Te Atrapé”.
Habiendo visto ya la película, debo confesar que los comentarios que había escuchado no estaban equivocados. “Te Atrapé” no es una película terrible —está dirigida con estilo y tiene un par de momentos hilarantes— pero desperdicia una historia que hubiera podido manejar un tono más sarcástico, más oscuro, para desarrollar una narrativa genérica que se siente como cualquier otra comedia mediocre norteamericana. “Te Atrapé” es frecuentemente vulgar pero sorprendentemente poco audaz, más dispuesta a mostrar chistes de sexo o con malas palabras, que a desarrollar gags inteligentes u originales. Súmenle a esto un tercer acto que se adentra en el sentimentalismo, abandonando cualquier momentum cómico que pudo haber desarrollado antes, y el resultado es francamente decepcionante.
Aunque no lo crean, “Te Atrapé” está basada en una historia real. Esto no hace que la película sea ni mejor ni peor (aunque los bloopers que nos enseñan durante los créditos finales, que muestran a los personajes de la vida real comportándose como niños grandotes, son bastante divertidos). Cinco amigos Hoagie (Ed Helms), Callahan (Jon Hamm), Randy (Jake Johnson), Sable (Hannibal Buress), y Jerry (Jeremy Renner)— comenzaron una tradición cuando eran niños, la cual siguen cumpliendo incluso ahora que son adultos con carreras y familias: cada mayo es el mes de las “chapadas”, en el que se tienen que perseguir los unos a los otros, jugando el clásico juego de la infancia, sin importar que vivan en ciudades diferentes. Acá lo que verdaderamente interesa es que alguien se convierta en “It” (o el “chapado”).
Este año, sin embargo, las cosas serán particularmente intensas. Jerry se está casando, por lo que los otros amigos viajan —a pesar de que no han sido invitados a la boda— para atraparlo. Después de todo, es el único que nunca ha sido “chapado”; mantiene un récord perfecto gracias a que es, posiblemente, el mejor jugador de “chapadas” del planeta. El plan de nuestros protagonistas, como deben imaginarse, no saldrá como ellos imaginaban, lo cual debería resultar en momentos hilarantes. Debería.
La introducción de “Te Atrapé” es larga pero necesaria; logra establecer las personalidades de cada protagonista, las reglas del juego —muchas de las cuales son demostradas a través de flashbacks en donde los vimos de niños— y las situaciones en las que se encuentran en el presente. La verdadera carne de la historia, sin embargo, está en el segundo acto, cuando vemos a los cuatro amigos tratando de atrapar a Jerry de una vez por todas. Y aunque es cierto que hay uno que otro momento que me dio risa —incluyendo la primera secuencia de cámara lenta en donde escuchamos las tácticas que aplica Jerry para evitar a sus amigos en voz alta—, en general, se trata de un relato sorprendentemente plano, en donde abundan los momentos claramente improvisados, y se extrañan los gags bien construidos.
Después de todo, carreras en carritos de golf hemos visto en muchas otras comedias norteamericanas, y la mayoría están mejor hechas que la que “Te Atrapé” tiene para ofrecer. Lo mismo pasa con la secuencia de las trampas de Jerry en el bosque —son más dolorosas que graciosas, siendo honesto— y hasta las anteriormente mencionadas secuencias en cámara lenta. La primera es muy divertida, pero es un recuerdo que utilizan —innecesariamente— dos veces más, lo cual termina por arruinar la novedad. De repente si las hubieran hecho con más energía y con narraciones más chistosas —más como una parodia del recurso de Sherlock Holmes en las películas de Guy Ritchie— hubieran funcionado, pero en su estado actual, no son más que relleno para una cinta que definitivamente debió durar menos.
No obstante, el mayor defecto de “Te Atrapé” está en el tercer acto, el cual se convierte en un ejercicio de manipulación emocional que comienza repentinamente, y no se siente bien merecido. Entiendo que querían darle un desenlace un poco oscuro a la película —la idea en sí no es mala—, pero considerando lo ligera y hasta inconsecuente que es el resto de la producción, insertarlo de esta manera simplemente se siente fuera de lugar. Hay maneras efectivas de combinar lo emotivo con lo hilarante, pero “Te Atrapé” simplemente no utiliza ninguna de ellas.
Lo cual es una pena, porque el reparto entero da muy buenas interpretaciones. Ed Helms es el perfecto hombre promedio; un poco obsesionado con un juego infantil, pero bienintencionado. Jon Hamm es elegante y estoico como Callahan; Jake Johnson es el perfecto stoner (lo cual no debería sorprenderle a nadie), Sable le otorga una cualidad callada e inesperada al diálogo absurdo pero a veces hilarante de Sable, y Renner interpreta a Jerry como una pseudo-parodia de su personaje en “El legado Bourne”. El problema es que la película no le da mucho material para trabajar; si querían hacer una sátira, no debieron hacerlo a medias. Isla Fisher es intensa y enérgica como Anna Malloy, y la seriedad de Annabelle Wallis contrasta perfectamente con la energía maníaca del grupo de amigos. Ah, ¿y mencioné que Rashida Jones tiene un rol pequeño? Dudo que lo vaya a destacar en su CV.
“Te Atrapé” no es la peor comedia que jamás haya visto. Me gustaron los recursos visuales que aplica para otorgarle energía a ciertas secuencias —los whip pans, los snorri cams—, y algunos de los chistes, así como la mayoría del diálogo de Hannibal Buress, funcionan, pero fuera de eso, se trata de una producción decepcionante que, debido a su premisa tan alocada, debió ser mucho simpática y divertida. Le falta algo de audacia, de valentía para desarrollar algo un poco más oscuro —especialmente si planeaban incluir el desenlace con el que nos dejaron. “Te Atrapé” sirve para pasar un rato medianamente entretenido durante una floja tarde de sábado o domingo, pero no la recomendaría para ver en la pantalla grande. Hay películas que, por más que hayan sido hechas para el cine, se disfrutan mejor en la pantalla chica, cuando uno tiene expectativas más bajas (y realistas).
Avance oficial:
- Mi calificación
Saludos cordiales.
Desarrollo una tesis doctoral, para la Universidad Católica de Costa Rica sobre la importancia del juego en la educación, y de casualidad me conecté con la película «Te Atrapé» y al buscar comentarios y documentación, llegué hasta tu comentario, me gustó en todo sentido, por un lado, tu sinceridad como comunicador sobre lo que la película te significó y el análisis que logras desarrollar sobre los personajes, el fondo, trama y el desenlace, incluyendo el vinculo con los protagonistas reales,
Agradezco me autorices, para incluir parte de tu análisis en mi tesis doctoral.
Bendiciones desde Costa Rica y te deseo muchos éxitos.
Elmer Ramírez Cheves.
Hola Elmer,
¡Muchas gracias por tu comentario! Sí claro, con tal de que incluyas mi nombre y la fuente original, no debería haber ningún problema.
Muchos éxitos con la tesis.
¡Saludos!