Rio 2 es una gran ejemplo de lo que se obtiene cuando no hay motivación alguna más que el deseo por la plata para realizar un filme. Puede que suene algo exagerado, pero me temo que es la realidad. La primera Rio no fue la peor película animada que jamás haya visto; es simplemente mediocre, pero al menos me hizo reír y me divirtió de manera inofensiva. Pero al verla jamás sentí que era necesario que tuviera una secuela; lamentablemente, recaudó millones de millones en todo el mundo, por lo que dicha continuación era inevitable, independientemente de si sus creadores tuviesen una historia qué contar o no. Y por lo que pude ver en Rio 2, definitivamente no la tenían.
OK, la secuela tampoco es la peor película animada que jamás haya visto; sin embargo, es sosa, plana y hasta por momentos aburrida. Jamás sentí que la trama tuviese suficiente importancia para el director Carlos Saldanha, o desarrollo alguno para que al menos se sienta importante. Aparentemente los números musicales y los chistes poco originales y el asombro visual eran más importantes para la gente de Blue Sky. Después de todo, para ganar plata con una película animada no es completamente necesario el tener una trama original (si no pregúntenle a Pixar y su mediocre franquicia de Cars, la cual ha recaudado mucho más dinero que la mayoría de sus películas más destacables). Lo único que tienen que hacer es tener colores brillantes y situaciones chifladas para distraer a los más pequeños.
Pero ese es precisamente el problema más grande que tuve con la película: que la sentía dirigida a los más pequeños de la casa. Una gran película animada; no, ni siquiera eso, incluso una película animada meramente buena está dirigida a toda la familia, es un filme que puede divertir tanto a grandes como chicos. Sí, igual su público objetivo probablemente esté compuesto por niños, pero eso no quiere decir que vaya a subestimarlos. Los niños son más inteligentes de lo que muchos creen, y estoy seguro de que pueden distinguir lo malo de lo bueno. La mayoría de los niños en la sala de cine donde vi Rio 2 no se veían particularmente entretenidos. ¿Y quién puede culparlos, cuando ya han sido engreídos por producciones infinitamente superiores, como La Gran Aventura LEGO o la saga deToy Story? Sólo durante los números musicales o una que otra payasada de los personajes parecían estar divirtiéndose.
Sí, sí, supongo que de igual manera hay una historia en Rio 2, aunque a fin de cuentas no importe mucho. Nuestros protagonistas de la primera película, Blu (voz de Jesse Eisenberg) y Jewel (voz de Anne Hathway) viven felices en Río de Janeiro mientras sus dueños humanos, Tulio (¿o Julio? juraría por lo más sagrado que en el doblaje al español lo llaman Julio y no Tulio… en fin, su voz en inglés la hace Rodrigo «Xerxes» Santoro) y Linda (voz de Leslie Mann) trabajan en el Amazonas. Y cuando éstos descubren un grupo gigante de guacamayos azules, a pesar de que se suponía que Blu y su familia eran los últimos, nuestros alados amigos deciden ir a la selva y visitarlos. Junto con más personajes cuyos nombres ni recuerdo. Y ahí se encontrarán con Eduardo (voz de Andy García), el papá de Jewel. Entonces la trama está dividida en dos: tenemos a Blu tratando de ganarse la aceptación de su dueño, y tenemos a los humanos tratando de combatir a Big Boss (voz de Miguel Ferrer), quien está destruyendo el Amazonas (y potencialmente el hogar del los guacamayos) para instalar minas. Evidentemente las tramas se cruzarán para el clímax del filme.
Y he aquí otra cuestión que me llamó bastante la atención: al igual que en A los 40 (valgan las diferencias), hay muuuchos personajes. Y hablo de muchos. Aparte de los protagonistas tenemos a un ave rival de Blu, a una tía de Jewel, al villano de la película pasada, Nigel (voz del genial Jemaine Clement), y su rana venenosa, a un secuaz de Big Boss, a un oso hormiguero (me encantó su diseño), a un perro que aparece al comienzo y al final, a un grupo de guacamayos rojos… uuff, y estoy seguro de que me olvido de más. En serio, ¿cuál era la necesidad de incluir a tantos personajes? ¿Era para que la película se sienta más… grande? ¿Épica? Porque lo único que logra hacer es que me sature, y encima le quita tanto desarrollo como protagonismo a sus… buenos, protagonistas.
Y llama la atención también el que haya tanto personaje cuando la trama es tan floja. El mensaje pro-ambiente está más claro que el agua (de hecho pudieron ser bastante más sutiles), y todo lo que tiene que ver con Tulio y Linda es francamente aburrido y un poco trillado. La historia de Blu tratándose de ganar a su suegro tampoco es mucho mejor; es como Meet the Parents versión light, con pocos chistes originales e incluso menos innovación. Los únicos momentos durantes los cuales la película realmente cobra vida son los números musicales; expertamente coreografeados, con música y canciones realmente pegajosas (me encantó que algunas incluso tengan letras en portugués) y una utilización del color realmente bella, definitivamente prefería cuando los personajes cantaban que cuando hablaban.
Y sí, como era de esperarse, la película es una maravilla visual: la jungla se ve realmente viva, llena de detalles y colores y movimiento. Pero eso, lamentablemente, no es suficiente para que la película valga la pena. Sí, es bastante inofensiva, y sí, uno que otro chiste funciona (especialmente cuando los guionistas se ponen algo dark y hacen uso de humor negro) y los números musicales son geniales… pero eso es todo lo que tiene. Una película puede ser bonita, pero si no tiene una historia que valga la pena contar… o aunque sea una manera interesante de contar una historia trillada… ¿cuál es el punto? Supongo que algunos niños la disfrutarán, después de todo, es totalmente inofensiva, pero sus padres probablemente se queden dormidos. Mejor sería ahorrarse la entrada del cine y quedarse en casa a ver alguna obra maestra de Pixar o gratas sorpresas recientes como La Gran Aventura LEGO.
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