Si uno se pone a revisar entradas anteriores de mi blog, encontrará mi review de Iron Man 2, en donde le doy una calificación de 10/10. Así es, cuando escribí esa entrada hace tres años, me pareció que la película era perfecta. Obviamente ahora no pienso lo mismo, lo cual no quiere decir que Iron Man 2 no me gusta. Simplemente prefiero la primera película, y pienso que, a pesar de que es entretenida y todo, tienes fallas bastante significantes. (¿Ejemplos? Un villano no muy bien desarrollado, está demasiado enfocada en preparar la trama de Los Vengadores, entre otros.) En fin, creo que ahora que ya vi la tercera película, me doy cuenta de por qué me emocioné tanto cuando vi la segunda: realmente me encanta el personaje de Iron Man (o Tony Stark), por lo que me dejé llevar. Así que esta vez no pasará lo mismo. ¿El problema? Iron Man 3 me gustó un montón también. Pero tranquilos, trataré de ser lo más objetivo posible.
Después de que Los Vengadores fue un éxito tanto a nivel comercial como a nivel creativo (gracias al gran Joss Whedon, por supuesto), tenía una preocupación bien específica en relación a la llamada “Fase 2” del universo cinematográfico de Marvel: las expectativas estaban demasiado altas. Los Vengadores fue tan buena, que cualquiera de las películas que le sigan serían juzgadas de manera más dura, por lo que el primer filme de la Fase 2, Iron Man 3, sería la prueba de fuego para esta teoría. Y felizmente puedo decir que pasa la prueba… pero a la vez también admito que algunos fans (especialmente de los cómics) van a tener algunos problemas con la película. Es una situación un poco complicada.
La película se desarrolla después de Los Vengadores, y ya nada es lo mismo para Tony Stark (Robert Downey Jr.) Ha visto aliens, dioses, y sobrevivió una experiencia mortal, por lo que ahora sufre de pesadillas, y dedica la mayoría de su tiempo a crear y modificar más trajes de Iron Man, a pesar de que ahora Pepper Potts (Gwyneth Paltrow) está viviendo con él. Y esos no son sus únicos problemas – hay un nuevo villano en el mundo, y se hace llamar El Mandarín (Ben Kingsley). Está haciendo explotar bombas por todo Estados Unidos, y aparentemente quiere acabar con el Presidente. Por otro lado, un científico que en el pasado quiso trabajar con Stark pero fue rechazado, Aldrich Killian (Guy Pearce), ha creado una manera de alterar el ADN humano y le hace una oferta a Pepper, pero ésta lo rechaza sospechando que tiene intenciones algo turbias. Y cuando Happy (Jon Favreau), su guardaespaldas, sigue a uno de los hombres de Killian y sobrevive un atentado explosivo, sus sospechas se confirman – eso, y entra la posibilidad de que pueda estar relacionado con El Mandarín.
Uno de los aspectos más resaltantes del filme, especialmente para los fans del cómic, es la inclusión del Mandarín, quien es considerado del archi-enemigo de Stark en las novelas gráficas. Las expectativas para la aparición de este personaje en la película eran altísimas, expectativas que crecieron cuando se anunció que el gran Ben Kingsley lo interpretaría. Bueno… digamos que el personaje no es precisamente igual al de los cómics. Sin arruinar ninguna de las sorpresas de la película, se trata de una caracterización diferente, y creo que esa pueda ser la razón principal por la cual algunos fanáticos se puedan molestar. A mi no me fastidió – es más, me pareció una sorpresa osada y arriesgada, algo digno de mencionar teniendo en cuenta que tomar riesgos no es algo por lo cual las películas de Hollywood se han hecho famosas. Fue inesperado, y para mi funcionó.
Teniendo en cuenta lo anterior, es medio obvio que el verdadero villano de la película es Killian, y Guy Pearce hace un excelente trabajo, tanto como un científico nerd y raro en los 90s, como haciendo de un villano más sofisticado y creído en el presente. Y, nuevamente, sin querer arruinar mucho, cuando se pone físico y se enfrenta con Stark, es creíble.
Por otro lado, y algo predeciblemente, Downey Jr. es excelente como Tony Stark. El diálogo que le da Shane Black es muy gracioso e inteligente, y Downey Jr. lo hace funcionar, causando risas, pero sin ser bufonezco. Pero lo más interesante es el desarrollo que tiene el personaje durante la película, el cual muchas veces se da a través de la voz en off de Stark (la cual funciona sorprendentemente bien). Como siempre, está la cuestión de si Iron Man es el traje o el hombre (en este caso, Stark), por lo que durante el segundo acto del filme, Stark se la pasa en Tennessee sin su armadura. Cuando es atacado, debe improvisar y pelear sin su tecnología, lo cual me pareció un buen toque que me hace recordar a cuando estaba en la cueva de Afganistán en la primera película. Adicionalmente, es durante esta parte del filme que Stark se hace amigo de un chibolo, Harley Keener (Ty Simpkins), quien es casi una versión infantil de Stark, y sirve como la voz de la audiencia en la película (preguntándole sobre los eventos de Los Vengadores, principalmente.) Simpkins hace un buen trabajo con su rol, especialmente considerando que muchas veces los papeles de niños en películas de este tipo pueden llegar a ser irritantes o estúpidos. Felizmente no es el caso.
El resto del reparto hace un buen trabajo también, pero no resaltan tanto como Downey Jr., Pearce o el chibolo. Don Cheadle repite su rol de War Machine, solo que ahora se llama Iron Patriot, y se dedica a proteger al presidente (la forma en que el Black se burla del concepto súper-patriótico del Iron Patriot es excelente, aunque me sorprende que no haya hecho referencias al Capitán América.) Paltrow es buena como Potts, especialmente ahora que tiene un rol más físico (como pueden haber visto en los tráilers, en algunos momentos llega a usar una armadura.) La bella Rebecca Hall aparece como una científica que conoció a Stark en los noventas y reaparece luego para (aparentemente) ayudarlo a encontrar al Mandarín, y el anteriormente mencionado Kingsley hace un gran trabajo con el villano, a pesar de que no haya sido precisamente lo que los fans esperaban.
Visualmente la película es excelente, y se nota que ha tenido un presupuesto algo más elevado que las dos anteriores. Debo decir que es muy emocionante ver a las armaduras en acción, especialmente durante el clímax, en donde Stark llama a todos sus “drones” y los hace pelear en grupo – es emocionante, el CGI usado para las armaduras y explosiones es casi perfecto, y lo hace sentir a uno como chibolo. Además también me gustó el concepto de la armadura Mark 42 – Tony la puede llamar con gestos, y la puede hacer venir y pegarse a su cuerpo parte por parte, incluso cuando se encuentra a kilómetros de distancia. Se trata de un efecto visual muy efectivo, y da chances de creatividad durante los enfrentamientos posteriores. Y hablando de enfrentamientos – a pesar de que es una película bien centrada en sus personajes y en su trama, hay bastante acción; mi escena favorita es cuando Stark rescata a gente cayendo del avión del Presidente, en donde hace que todos se vayan agarrando de las manos uno por uno. La combinación de efectos especiales casi perfectos, humor y emoción hacen que la escena sea una ganadora.
¿Alguna queja? Sí, supongo que una que otra. A pesar de que Rebecca Hall es bellísima y una excelente actriz, su personaje no es muy convincente. O sea, la actuación en sí es buena, pero las motivaciones de Maya Hansen no son muy creíbles, o en tal caso no están muy claras. Además, a pesar de que la película es muy entretenida y por partes demasiado graciosa, puede que el tono ligero no le guste a todo el mundo – el filme trata temas serios y escenas dramáticas, lo cual contrasta con los chistes y los diálogos ligeros y sarcásticos de Stark, contraste que puede que no le funcione a todo el mundo. A mi sí me funcionó – es imposible hacer una película complemente seria con Tony Stark.
En fin, a mi parecer Iron Man 3 es una muy buena película de súper héroes, de las mejores que Marvel Studios ha hecho hasta ahora. El desarrollo de los personajes, especialmente el de Tony Stark, es significativo, las escenas de acción son emocionantes, los efectos especiales son excelentes, y el filme contiene un par de sorpresas que, aunque puedan enfurecer a algunos fanáticos puristas de los cómics, creo que funcionarán para la mayoría del público, ya que se trata de riesgos que funcionan a favor de la narrativa de la película. Es chistosa, es ligera, es entretenida, está bien actuada, no se siente como un comercial para Los Vengadores 2 (ya que funciona aparte de los demás filmes, a pesar de que las consecuencias de Los Vengadores se sienten) y toca un par de temas (especialmente en relación a la identidad) que no la hacen hueca. En pocas palabras, es un gran comienzo para la Fase 2 del mundo cinematográfico de Marvel.
Nota: quédense hasta después de los créditos para ver la escena adicional. No es importante, pero es un mate de risa. (Y me gusta cómo justifica el uso de la voz en off durante toda la película.)