Si hay algo que ha caracterizado al cine peruano en los últimos años, es un tema que se puede encontrar en casi todas las películas: el terrorismo. Para aquellos que no lo sepan, el terrorismo (es decir, el MRTA y el grupo Sendero Luminoso) tuvieron una significante presencia en la historia peruana durante la década de 1980 y principios de los 90, y ha dejado una marca importante en la mayoría de los peruanos. O al menos en aquellos que vivieron esa época. Mi generación (nací en 1990) no recuerda lo suficiente de esa época como para poder decir que, efectivamente, vivieron en carne viva la época del terrorismo, por lo cual, al menos yo, no puedo decir que empatizo totalmente con las historias que se desarrollan en esa época. Las entiendo, evidentemente me dan pena y comprendo por qué son importantes… pero la simple verdad es que no las viví. Después de todo, sólo tenía 1 o 2 años de edad.
Pero, “¿qué tiene que ver esto con la película “Asu Mare”?”, se preguntarán ustedes. Bueno, como dije al principio, muchas de las películas peruanas de los últimos años contaban historias relacionadas a la época del terrorismo, ya sea directamente o indirectamente. Y como dije también, comprendo que fue una serie de sucesos infinitamente importante. Lo que no entiendo es por qué tantas películas trataban el mismo tema. Es como si Estados Unidos solo hiciera películas sobre alguna de las guerras que han peleado o, más recientemente, sobre los atentados del 11 de setiembre. Sí, es importante, y sí, hay historias significativas qué contar de ésa época, pero no es el único tema peruano para adaptar cinematográficamente.
Honestamente, yo ya estaba cansado. Estaba cansado de ver terrorismo, terroristas, mujeres violadas y violencia basada en hechos reales en tantas películas peruanas. Quería algo diferente. Y precisamente eso es la película “Asu Mare”: algo diferente.
Algunos dirán (y estoy seguro que ya lo hacen) que se trata únicamente de una película comercial del montón, una comedia sin mayores aspiraciones que le hace propaganda a varias marcas (siendo la cerveza Brahma la más resaltante) y para colmo también a su protagonista, Carlos Alcántara. Después de todo, se trata de un filme cuasi-autobiográfico ficcionalizado.
Y puede que todo eso sea cierto, pero en este caso al menos, son características que no deberían mencionarse de manera despectiva. Porque, en mi opinión, considero que “Asu Mare” es algo fresco, diferente en el cine peruano. Es una película que, es cierto, fue fabricada únicamente para hacer plata (aunque no descarto que haya habido aspiraciones artísticas a la hora de realizarla… ¡siempre (o casi siempre) las hay!), pero que fue muy bien planeada y muy bien construida. A diferencia de muchos filmes peruanos, se hizo un estudio previo de mercado, se llegó a la conclusión que una comedia protagonizada por Alcántara sería económicamente viable, que haría que sus auspiciadores ganen plata, que sería un éxito.
Y eso fue precisamente: un éxito. Se puede decir creo ya que es la película peruana más exitosa de la historia; ha roto todo tipo de récords acá en Perú, y las dos veces que la he ido a ver al cine (primera vez que hago algo así con una película peruana, cabe mencionar) la sala estaba totalmente llena. Y durante la duración del filme, todo el mundo parecía divertirse. Nunca había visto eso con una película peruana (aunque debo admitir que nunca vi éxitos previos como “Pantaleón y las Visitadoras” en el cine; era muy niño.)
Si no lo han notado todavía, la película me gustó bastante, mucho más que la mayoría de filmes “serios” peruanos que se estrenan todos los años. Y a pesar de saber que no hay forma que todo lo que cuenta Alcántara en la película sea verdad, igual me divertí. (Como se dice por ahí, nunca se debería permitir que la realidad prevenga que cuentes una buena historia.) En fin, “Asu Mare” está basada en el stand-up de Alcántara, donde habla sobre su vida, pero especialmente sobre su madre. La película alterna entre la narrativa en sí y escenas del show, donde Alcántara complementa la historia con chistes y anécdotas. Comienza, por supuesto, con su nacimiento, y termina en el presente, cuando él ya es famoso. Curiosamente, la película cubre más sus primeros años (infancia, adolescencia y juventud), y pasa muy rápido por su salto a la fama (casi ni explicándolo), cosa que debo admitir sí me fastidió un poquito.
¿Por qué me gustó la película, entonces? Primeramente, como se trata de una comedia, su principal objetivo debe ser el hacer reír a su audiencia, y debo decir que “Asu Mare” cumple con este objetivo de manera casi perfecta. En pocas palabras, no me reía tanto con una película hace tiempo (aunque como en casi todos los casos, las risas se vuelven menos frecuentes durante la última media hora, pero eso se debe a que la película se pone un poco “feeling”.) El guión es muy bueno, a pesar de tener una estructura convencional; el diálogo es directo, bien
escrito, y los chistes son excelentes. No recuerdo ningún chiste que haya fallado y, a pesar de que yo ya había visto el show de Alcántara, las escenas del stand-up también me mataron de risa. El único problema que le veo a la película es que, creo yo, no tendría mucho éxito en otros países: es una película bien peruana, si saben a qué me refiero: tiene muchas referencias a la cultura peruana (especialmente Limeña), está llena de modismos y jergas, e incluso las actitudes y problemas son bien Limeños, por lo que creo que la mayoría de chistes no le harían mucha gracia a gente fuera del Perú. Bueno, ojalá me equivoque (igual no tengo la menor idea de si la exportarán o no.)
Pero no sólo es el hecho de que me dio mucha risa. En muchos aspectos, “Asu Mare” es una buena película, no solo una entretenida. A nivel técnico es impecable; fue filmada, asumo en HD (aunque no tengo claro con qué cámara), lo cual, junto con la competente dirección de fotografía (la cual en algunas escenas es bastante “bonita”, pero usualmente es simplemente funcional y competente – lo cual es lo mejor en el caso de una comedia) y la buena dirección de cámara, hace que la película se vea, bueno, limpia, y parezca mucho más cara de lo que realmente fue. (Según me dicen, el presupuesto fue de 700 000 dólares, lo cual es no es mucho, aunque para los estándares peruanos, creo que es bastante alto.) No encontré ningún aspecto técnico (ya sea visual o sonoro) que me disgustara, lo cual no me pasaba hace tiempo en una película peruana. (Probablemente la última vez fue cuando vi “La Teta Asustada” – el aspecto técnico fue lo único que me gustó de esa condenada película.)
Y creo que eso es básicamente lo que tengo que decir – “Asu Mare” es la primera película peruana que vi dos veces en el cine porque me pareció muy divertida, cosa que no me ocurría hace tiempo con una producción nacional (OK, creo que he parafraseado esa frase ya demasiadas veces…. Pero bueno, ¡es verdad!) No paré de reír durante casi toda la película, e incluso durante las últimas escenas no me aburrí, ya que, aunque el contenido emocional es algo cliché y predecible, igual funciona porque el personaje de Alcántara fue muy bien desarrollado durante todas las escenas anteriores – después de todo, ¡es una película sobre su vida! Puede que sea disfrutada por audiencias de todos los países, y puede que no, pero al menos para este Limeño bien Limeño, se trata de una de las mejores películas peruanas que haya visto últimamente, y teniendo en cuenta eso, no puedo estar más feliz porque haya sido un éxito rotundo. Con suerte esta nueva producción servirá como un parte-aguas en nuestra pequeña industria, y hará que la gente se dé cuenta que sí es posible crear algo así como un blockbuster nacional. Eso, y que hay más de un tema o de un tipo de película qué hacer acá.
(Nota: Entre los avances previos a la película, me pasaron el primer tráiler de Cementerio General, una película de terror peruana estilo found footage. No me dio mucho miedo (es más, me reí un par de veces), pero nuevamente… ¡es algo diferente! ¡Sigan así!)
